Este mes escribo en mi blog un artículo sobre Venus en Acuario. La particularidad que tiene Venus en este signo es la necesidad de libertad. Casi terminando el círculo zodiacal, nos encontramos a una Venus independiente y singular, es decir, sin depender de nada ni de nadie.

Sí, Venus en Acuario manifiesta una energía de aire para presentarnos a personas que han elegido una forma diferente de relacionarse, sin apegos ni compromisos.

Relacionarse con alguien que tenga Venus en Acuario en su Carta Natal supone atenerse a unos límites bien establecidos, especialmente difíciles para personas con mucha agua en su carta, ya que son más idealistas y sentimentales.

Por otra parte, Venus en Acuario nos muestra una forma diferente de conectar con la abundancia, ya que es una vibración que atrae métodos innovadores para generarla. Ya sabemos que Acuario es un signo “eléctrico” que conecta muy fácilmente con la intuición y la expande, la acrecenta, por lo que estas personas tienen una capacidad increíble para ser prácticas y utilizar bien sus dones.

Acuario es un signo creativo, al igual que su opuesto, Leo; por lo tanto, estamos ante el eje de la creatividad. A una persona con Venus en Acuario le encanta crear, especialmente cosas diferentes, originales, únicas, abstractas, peculiares, curiosas, atípicas, inéditas, raras o excéntricas, así es la vibra de Acuario. Por ello, sin quererlo ni beberlo, no pueden pasar desapercibidos, pues su arte llama la atención.

A día de hoy, con la energía acuariana que estamos viviendo, podemos entender que cualquier cosa es posible a nivel de relaciones, trabajos, arte, música, familias, sociedad, política, urbanismo, etc.

Sin duda, tenemos que aprender a manejar esta energía, ya que se impone en nuestra sociedad para que nos sintamos libres de poder elegir lo que realmente queremos para nosotros como individuos únicos, y no estoy hablando de egoísmo, estoy hablando de libertad.