Mercurio en Piscis se siente conectado con toda la información disponible, es tanta la que puede recibir que se abruma, se satura y se confunde.
Mercurio en Piscis es el último eslabón de esta serie por ser Piscis el último signo del zodíaco. Ha pasado por tantas experiencias a través de todos los signos y energías que, ahora, su discurso puede venir de la conexión emocional y energética con un otro o del colectivo.
Cuando nos encontramos con una persona con Mercurio en Piscis en su Carta Natal es muy probable que su voz sea suave, sin un tono definido, más bien aparenta no tener voz, o no tener fuerza en la voz.
Mercurio se ve imbuido en una energía mística y espiritual como la de Piscis que, además, es femenina y muy sensible; es una energía de agua, muy emocional, tremendamente empática, por ello, la persona no sabe si lo que siente es suyo o es de otro.
Mercurio en Piscis tiene sin embargo una gran capacidad para tener sueños y obtener importantes informaciones a través de ellos. Es durante el sueño donde la persona puede sentirse más identificada, donde ve una realidad más afín a su energía ensoñadora.
Mercurio en Piscis cuenta con un gran don, el de la creatividad. Mercurio, en esta configuración puede dar tanto a grandes escritores creadores de historias increíbles, bellas y fantásticas, como a periodistas cínicos y malversadores de la información sin ningún pudor por su parte. Por que sí, dentro de el caos característico pisciano, entra también la mentira y la manipulación, más aún con el simpático y parlanchín Mercurio, nos la puede colar muy bien.
Por supuesto, hay que ver el resto de la Carta Natal de la persona, siempre lo digo, no se puede generalizar. Mercurio aquí se encuentra desubicado, exiliado, como decimos en Astrología. Piscis es su signo opuesto y puede tener reacciones derivadas simplemente de las energías de su entorno y transformarse en lo que no es.