Esta luna en géminis proporciona una incesante curiosidad por todo, da mucha seguridad a la persona que siente que sabe muchas cosas, por lo tanto, es una Luna muy intelectual. Esto también quiere decir que intelectualiza los sentimientos, la persona siempre tiene una razón o una explicación a los sentimientos que le abordan.
La persona con Luna en Géminis necesita expresar lo que siente de manera abierta, a menudo rápida o cambiante, por lo que no piensa mucho las cosas antes de hablar y puede meter la pata o dirigirse a otra persona o personas con demasiada confianza.
Su sensación de seguridad se ve inestable porque su energía está repartida en demasiados intereses, de esta manera, no sabe poner el foco en un único objetivo que le ancle de alguna manera. En una carta natal sería necesaria la energía de la tierra para equilibrar a esta Luna.
Géminis o su regente Mercurio, se les caracteriza por ser mimos, por copiar o imitar a otros. Luna en Géminis empatiza demasiado con los sentimientos de otras personas que, por esta circunstancia, a veces no sabe si son suyos también.
Como la Luna siempre nos lleva a recordar el pasado, cuando se encuentra en Géminis, logra que la persona ame la historia, la arqueología o la genealogía.
Tanto la Luna como el signo de Géminis se adaptan muy bien a las circunstancias que están viviendo, esto favorece mucho su situación ante momentos fluctuantes o cambiantes.
Luna en Géminis favorece mucho la escritura y la oratoria, con una gran sensibilidad, creatividad y diversidad, dando obras realmente meritorias. Ni que decir tiene que puede dar grandes maestr@s.
Luna en Géminis nos señala las relaciones con los hermanos, especialmente con alguna hermana o, incluso, que la madre tenga una relación tan cercana que parezca más una hermana que una madre.
Por todo lo que he narrado, Luna en Géminis hace honor a la variedad de temas y focos de atención que puede abarcar y atender. Es muy rica en matices.
Lola Juan